Cultura

En país de ciegos te veas

Publicada

País de ciegos…

En este Universo en el que habitamos miles de millones de personas, hay muchas que piensan que la vida de cada quien ya está escrita, otros más siempre ven la posibilidad de escribirla en el diario, sea como sea; al final, todos tenemos la capacidad de escapar y reescribir el dichoso destino. Justo esto pensaba en mis años en los que salía de la adolescencia para entrar en la adultez legal y oficial, la de los 18 años. Yo no entiendo para nada temas de millenials y cuanta cosa, no va conmigo. A la vida hay que verla simple.

Todo cambió un día, cuando descubrí la novela que golpearía e impulsaría muchas cosas en mí: Ensayo sobre la ceguera de José Saramago. Fue todo un shock literario, me puso a reflexionar como ninguno y pronto se metió en el olimpo de mis libros favoritos. Y es que la creación, y obra maestra del portugués ganador del Nobel en el 98, me llevó a refrendar mi gusto en los libros, pero también a entender que detrás de las palabras simples, vale la pena echar una pensada y descubrir todo lo que el autor quería transmitir.

¿Qué harías si un día cualquiera te levantas y descubres que te has quedado ciego? Es un cuestionamiento complicado, justo ahí entra lo que comentaba en el primer párrafo. Uno piensa que va día con día escribiendo su vida e historia, pero hay situaciones que simplemente se escapan de las manos y que pueden pasar, sin poder hacer absolutamente nada para cambiarlo. Es así como Saramago empieza su libro, de pronto un automovilista se queda ciego en pleno semáforo, su mente no se va a oscuras, ya que se trata de una ceguera blanca. Bajo esta premisa arranca una novela fascinante y que hay que ver por diferentes aristas. Así de grande es lo que nos ha heredado el maestro Saramago.

Poco a poco la ceguera se expande y de pronto todo el mundo se queda ciego, es una plaga que nadie sabe cómo se contagia, peor aún es que cuando hubo posibilidad de estudiar al primer ciego, el oftalmólogo se dio cuenta de que el paciente no tenía nada extraño, todo parecía sano en sus ojos, pero la realidad que estaba viviendo era muy distinta.

Advertisement

Es entonces que arranca la historia de un devastador mundo de ciegos, en donde sólo hay una persona que puede ver: la mujer del médico. Una frase que destapa y da un golpe en la imaginación, es cómo ella describe lo que es estar en un lugar en el que nadie ve.

“Andan por ahí, sin saber qué hacer, vagan por las calles, pero nunca mucho tiempo, andar o estar parado viene a ser lo mismo para ellos, salvo encontrar comida no tienen otros objetivos, la música se ha acabado”.

La novela va avanzando y descubrimos que los ciegos se vuelven violentos, ambiciosos, sucios, con una sola cosa en la cabeza: comida. Lo triste sale a relucir, cuando nos vamos enterando que ninguno puede volver a su casa, van perdiendo a su familia, se están convirtiendo en seres egoístas, hay momentos en el que parece que estamos leyendo del Apocalipsis, que es una plaga mortal estilo zombis y esas cosas que pasan en las películas, pero no, Saramago no es simplón, Saramago es muy complejo y el rompecabezas va demostrando esa brillantez con el pasar de las páginas.

En un mundo de ciegos, y en el que sólo una mujer puede ver, ésta se convierte en una especie de guía espiritual de muchos, otros la ven como una amenaza y ella… ella sólo piensa en quedarse ciega en más de una ocasión, no quiere ver cómo todo se vuelve un caos y se cae a pedazos. Todo se vuelve más difícil cuando tiene que cargar con un grupo de personas como si fueran niños chiquitos, lo cual lo lleva a querer también tener la ceguera blanca.

“Si pudieras ver tú lo que yo estoy obligada a ver, querrías ser ciego”.

Ahora voy más allá de lo que es la historia. La novela cuenta con un narrador que va contando el desenvolvimiento de este mundo de ciegos, que se van tornando en animales, pero él mismo opina, se mete en la trama y reflexiona sobre lo que está pasando, dando una perspectiva única en la que hay un dejo de complicidad entre el narrador y el portador del libro.

La ceguera es simbólica y poco a poco se va desenmarañando, la mujer asegura que todos han perdido la vista por falta de fe, aunque también llega a creer que es por miedo. Otra chica, incluso piensa que el haberse quedado ciega quiere decir que ha muerto.

Advertisement

“Estamos ya muertos, estamos ciegos porque estamos muertos, o, si prefieres que lo diga de otra manera, estamos muertos porque estamos ciegos, da lo mismo”. “Creo que no nos quedamos ciegos, creo que estamos ciegos, Ciegos que ven, Ciegos que, viendo, no ven”.

El propio autor definía todo en la frase: trata sobre “la responsabilidad de tener ojos cuando otros la perdieron”.

Saramago guardó muchos pensamientos y situaciones en el fondo de una novela desgarradora. Una de ellas es que todos los que ven día a día, que tienen ese don, parecen no cuidarlo, ni darle la importancia debida, es así que cuando se quedan ciegos, sólo cuando pasa algo así de radical, es cuando empiezan a extrañar a sus ojos lúcidos. También está la referencia a que sin visión, miedo y caos se apoderan de todos, al grado de perder la humanidad su propia esencia.

Hace una imagen aterradora, sin esperanza, en la que invita a la reflexión de los tiempos que se viven, mostrando que consiguió entregar una obra atemporal. El hecho de que la ceguera sea descrita como blanca es una metáfora que se define como un exceso de luz que provoca que nadie vea. Saramago siempre comulgó con las ideas radicales y aquí nos deja una de las más radicales de todas. Su ceguera es la alegoría a cómo en ocasiones la sociedad está tan apabullada y acostumbrada a ciertas cosas que no reflexiona, no logra ver más allá, es como cuando él decía que siempre sería pesimista, pues en el momento que uno se conforma las cosas dejan de avanzar, no hay progreso, el mundo se mantiene igual. Un golpe como la ceguera, es literalmente la forma en que se pueden abrir los ojos.

“Tan lejos estamos del mundo que pronto empezaremos a no saber quiénes somos”.

Las situaciones se van al extremo, se hace un repaso por etapas. Primero los que ven comienzan a encerrar a los primeros ciegos y los hacen vivir en condiciones inhumanas. La gente hace sus necesidades fisiológicas en cualquier parte, se relata como las personas van pisando todo el tiempo desechos humanos. Los muertos se medio entierran, o simplemente quedan a la intemperie. Se pierde el pudor en el sexo y es practicado en donde se pueda. La comida se deja de cocinar.

“Dígame, doctor, qué higiene hay aquí. Probablemente, sólo en un mundo de ciegos, serán las cosas lo que realmente son”.“…en este infierno al que nos arrojaron y que nosotros convertimos en infierno del infierno, es gracias a esa persona, que tuvo el valor de matar a la hiena en el cubil de la hiena”.

Al final, el mundo de los ciegos no hace más que descubrir la verdadera condición humana, acomodarse, acostumbrarse, ir en manadas dando tumbos, como si ceguera fuera sinónimo de primitivismo, también se siente la revelación del sin sentido:

Advertisement

“No llores, qué otras palabras se pueden decir, las lágrimas qué sentido tienen cuando el mundo ha perdido todo su sentido”.

Para destacarse es como cuenta la historia Saramago. Aquí no hay nombres, eso no es relevante, simplemente se resalta algún atributo físico o rol, para así hacerse presentes en cada tramo que se va contando. Es así como los protagonistas son: el primer ciego, el médico, la mujer del médico, la chica de las gafas oscuras, el viejo de la venda en el ojo, el niño estrábico, el ladrón, el farmacéutico, entre otros. Todos conforman un grupo que une muchas causas, hay de todas edades, algunos son ateos, otros fieles creyentes, conservadores y liberales, valientes y cobardes. Al final todos van sirviendo a la misma causa, y a pesar de no tener los nombres a la mano, no faltará que te logres identificar con alguna personalidad.

Sin duda es una novela fundamental en la historia de la literatura, todo un clásico del que se ha hablado más de una vez, que te aseguro no dejará a nadie indiferente. Es una novela que puede despertar el gusto por la lectura, las ganas de leer más, de enamorarse de Saramago, que es un escritor que tiene muchos libros fundamentales en su biblioteca, ya vendrá una columna dedicada enteramente al portugués. Con Ensayo sobre la ceguera no hay pierde, siempre es una recomendación que va a pegar, es un libro difícil, sí, pero sumamente entretenido.

Fotograma de la película «Ceguera»de 2008, basada en el libro «Ensayo sobre la ceguera» de José Saramago.

Como dato extra, existe una adaptación al cine, titulada Ceguera, que cuenta con las actuaciones de Julianne Moore, Mark Ruffalo y Gael García Bernal, como ejercicio fílmico es pasable, pero se queda corta y a años luz de la obra de Saramago, así que no, no la tomen como referencia a la hora de elegir leer esta gran novela. Una recomendación, que insisto, nunca falla, hasta la fecha no conozco a nadie cercano, o que lo invité a leerlo, que se haya quejado o me lo aventara en la cara.

 

Óscar Beltrán ha trabajado en medios impresos y radiofónicos como reportero en las fuentes de cultura, policíaca y deportiva. Ahora se desempeña como editor en jefe de la aplicación para smartphone «Plans».

 

Advertisement

 

Laberinto

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

LO MÁS VISTO

Salir de la versión móvil