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Pablo Montaño: un reto independiente con sombrero propio
Fue en un viejo mercado de Buenos Aires donde finalmente lo encontró, durante un viaje de seis meses por Sudamérica, después de cruzar Panamá, Colombia, Perú y Brasil; en todos los sitios, Pablo Montaño buscaba ese fetiche que le acomodara y gustara, ligero y fácil de llevar. Halló varios en el camino, pero los perdía sistemáticamente.
Ahora es su símbolo y distintivo durante la campaña a diputado federal independiente por el Distrito 8 de Jalisco por la organización Wikipolítica: un sombrero de fieltro estilo campero, de gaucho, que al verlo recuerda al Fedora que Clint Eastwood usaba en su Trilogía del Dólar, luciendo la misma barba poblada, aunque un poco más oscura, como de 29 años.
De hablar abundante y articulado, unos gruesos lentes delatan horas de biblioteca y refinan el perfil vaquero. El joven candidato dispara ideas, algunas recogidas en su convivencia con los “wikis”, otras de su inquietud ambientalista desde que estudiaba Ciencias Políticas y Gestión Pública en el ITESO y más delineadas en su paso por la Maestría en Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable en la Universidad del Colegio de Londres.
Originario de la Ciudad de México, Montaño creció en una familia trotamundos, de padre médico veterinario, su trabajo los hizo vivir en estados como Veracruz, Puebla, Durango y Morelos. Pasó su adolescencia en Chihuahua, antes de recalar en Guadalajara donde se quedó a estudiar, a vivir y a hacer familia. Durante la entrevista, Pablo mira el celular con insistencia, las notificaciones de Whatspp lo mantienen al tanto del embarazo de su esposa y del maremágnum que deben ser sus días: El nacimiento, está programado para la veda electoral.
Haciendo honor a su apellido, a Pablo le dio un tiempo por la escalada, es ahí donde se abrió al activismo, gracias a este deporte, conoció de cerca el impacto de la huella del hombre sobre la naturaleza. Pronto se relacionó con la organización Ciudad para Todos, centrada en temas de movilidad, pero también se involucró en asuntos de cultivos agroecológicos urbanos, en la defensa de Temacapulín y la problemática del Río Santiago en El Salto.
Participó en la campaña de Pedro Kumamoto al Congreso Local, —lo conoció durante la protesta que asociaciones civiles realizaron por la construcción del Puente Matute Remus—, pero el periodo como diputado lo pilló en el estudio de su maestría, con la que quería adquirir los fundamentos teóricos para defender la causa ambientalista, por lo que colaboró a la distancia. A su regreso se convirtió en un perfil idóneo para la candidatura.
Las fuerzas motoras de su batalla política las encuentra en referentes como el de la activista Marisela Escobedo, asesinada en Chihuahua mientras protestaba por el asesinato de su hija; los movimientos zapatistas en Chiapas o del municipio de Cherán en Michoacán; la lucha migrante (trabajó para la asociación FM4 Paso Libre en Guadalajara) y los esfuerzos en este problema de los sacerdotes Pedro Pantoja y Alejandro Solalinde.
Compites en el Distrito 8, que reúne a los barrios tradicionales y cosmopolitas de la ciudad, ¿cómo lo defines?
“Es fascinante y heterogéneo, no sólo en el tema de los estratos sociales, también en su carga cultural e histórica. No puedes hablar de Analco sin pensar que es la cuna del activismo y de la sociedad civil tapatía tras las explosiones del 22 de abril, o uno de los barrios fundacionales de la ciudad. No puedes hablar de Oblatos o de los corredores comerciales sin toda la dinámica que se genera ahí, en contraste con zonas económicas como Chapultepec”.
En la plataforma de Wikipolítica se aboga por una reforma al sistema de pensiones, ¿cuál es la problemática y la propuesta?
“Hay problemas de forma y fondo. El fondo es que tenemos un sistema de prensiones que precariza a los adultos mayores y convierte en legal el pago de pensiones de 2 mil pesos, que no les alcanza para vivir, eso es ya es una cuestión violatoria de principios constitucionales. En la forma vemos una atomización del sistema de pensiones actual, con IMSS, ISSTE o Pemex, con disparidades, cuando lo que podríamos tener es una homologación de este sistema, para regularlo mejor y entender lo que sucede con las pensiones del estado y con las afores. La propuesta es una unificación, y analizar que opciones hay”.
Hablan también de la búsqueda de un servicio público de excelencia ¿cómo se lograría esto?
“Los servicios públicos son deficientes y costosos, y eso toca varias áreas, una de ellas es una reforma educativa real, no una laboral-educativa, sino una revisión de los contenidos impartidos en las escuelas; otro aspecto es la fiscalización de los presupuestos erogados desde la Federación, como ocurrió con el reparto discrecional de los recursos de la SEP para publicidad. Hay un desprestigio de la rendición de cuentas, ese es el papel que queremos jugar, llevar a rendir cuentas a aquellos que no estén cumpliendo con los presupuestos asignados”.
¿Cuál es tu agenda en los asuntos ambientales?
“Quiero impulsar una aproximación no sólo de conservación, de nada más voltear a ver a la vaquita marina o al Bosque de la Primavera, sino hablar de la relación que tenemos como sociedad con el contexto que vivimos. Una de las iniciativas que me gustaría abrazar es en torno a la Ley General de Aguas. Hay un debate entre la Ley Pichardo y la ley impulsada por organizaciones de la sociedad civil; hay diferencias radicales, por un lado, se pretende mercantilizar el agua, permitir su uso para fracking, minerías y trasvases para procesos de extracción en el desierto; la otra es preservar los derechos de los pueblos originarios sobre el uso del agua, limpiar los ríos, orientar a nuestras ciudades a la captación pluvial”.
¿Tres diputados federales y dos senadores (los que compiten por Wikipolítica) es suficiente para una apuesta tan ambiciosa?
“Definitivamente no, pero esta agenda no se contiene en los espacios legislativos que perseguimos. Necesitamos tener capacidad de alcanzar acuerdos con otras fuerzas políticas, no vamos contra ellos. No son Juana y Pedro contra el mundo en el Senado; vamos a construir acuerdos y a tender puentes con aquellos dispuestos a hacerlo. Además, estas propuestas las vamos a estar socializando; nuestro compromiso es mantenernos cercanos al distrito, no se queda sólo en la retórica, si no contamos con el apoyo de la población; seremos 3 contra 500”.