Cultura
El señor de los gatos y el jazz
El señor de los gatos…
En todo gusto que se adquiere, siempre se elige algo que resalta y se destaca por sobre los demás. Pasa en el fútbol, es un gusto, cada quien elige a su equipo favorito, es un común en diversas situaciones. En la literatura yo elegí al mío, mi número uno, al que idolatro y le perdono sus momentos malos, le aplaudo como nadie los buenos y que siempre espero se anime a sacar un libro nuevo. Ese es para su servidor, el japonés Haruki Murakami.
Mundialmente conocido como el sub campeonisímo del Premio Nobel de Literatura, pues siempre se espera que lo gane y su nombre nunca aparece en boca de la Academia Sueca. Murakami es también blanco de críticas despiadadas por aquellos defensores de la literatura clásica. Encasillado por muchos como simple creador de best sellers y nada más. Algo que pareciera ser un pecado en el mundo contemporáneo es ser autor best seller, como si vender libros te hiciera menos bueno.
La realidad es que Haruki Murakami es para mí la voz más importante que existe en el género del realismo mágico, ése que muchos en Latinoamérica llevaron al boom, y es que el nipón va más allá y es capaz de mezclar fantasía e incluso situaciones absurdas, la más absurda, la hace emocionante, creíble e inolvidable.
Tengo que agradecer esos ratos que me ha regalado, esos momentos de lectura que me han emocionado y hasta he tenido que regresar en las páginas, pues tampoco es alguien sencillo de comprender, que es justo lo que lo hace tan valioso, pues no escribe para dar gusto a todos, ni para ser simplón, su intelecto lo lleva a crear historias de amor no convencional, que pueden parecer cursis, pero en el fondo no están cerca de serlo; de suspenso; de crimen; de regreso al pasado y de fantasía en donde existen personajes como el Coronel Sanders del KFC. Eso sí, su sello y que es un común en sus historias, siempre hay gatos y buen jazz.
Literatura y música
Los libros de Murakami se pueden leer mientras de fondo se escucha un soundtrack que el mismo autor recomienda. Y es que además de escribir, el japonés siempre ha dejado claro sus gustos y obsesiones. Una de ella es la recurrente aparición de gatos en sus relatos, el jazz es una parte importante de su vida, fue dueño de un club de este género en su país y él mismo tocaba instrumentos; su novela After Dark la escribió bajo el ritmo de la pieza musical de Curtis Fuller que lleva ese mismo nombre. También le es importante correr, que es cuando pareciera explota su genio y nacen las ideas, además de ser alguien interesado en el periodismo.
Murakami ha heredado algunas de las novelas que más aprecio de mi biblioteca personal. Aunque como todos no ha mantenido un ritmo de excelente, pues tiene bajones, no hay ninguna obra suya que me haya decepcionado.
Sus libros
Para empezar tenemos a Tokio Blues, su novela más popular y vendida en el mundo. La que le ha dado la vuelta al planeta, que tiene una adaptación al cine y que fue inspirada en la música de los Beatles. Ambientada en el Japón de los sesenta, presenta a uno de sus mejores personajes en la figura de la misteriosa Naoko, el amor juvenil del protagonista: Toru Watanabe. La trama se centra en el suicidio de ella y cómo afectó su pasado entre el círculo de amigos, entre ellos el novio oficial de Naoko, y cómo repercute en un turbulento presente en donde es acechado por nuevas tentaciones.
Hago un paréntesis. Les hablará de los libros del Zorro Rojo, una editorial catalana que sacó una pequeña colección (tres) de Murakami. Esta editorial apostó a ilustrar con verdaderas obras de arte sus libros, dándole vida a las letras del japonés. Aquí sacó un cuento inédito de nombre Sueño, que habla de un personaje que no puede conciliar el sueño, no duerme y todo el tiempo piensa en medusas.
Sputnik mi amor es el título de la novela más arriesgada del autor. Aquí sigue los pasos de la perrita Laika en el espacio, eso es solo el pretexto para dar rienda suelta a sus oscuras obsesiones, pues presenta un triángulo amoroso en el que el hombre pasa a segundo plano y la relación entre dos mujeres es la que se vuelve protagonista.
Cuentos
Los cuentos son parte importante de la obra de Haruki. Y es por ello que también ha presentado algunos libros de recopilación de breves cuentos. El que más disfruto es el de Sauce ciego, mujer dormida; por algo muy simple, en 24 relatos está presente lo mejor del escritor, hay locura, amor, muerte, jazz, animales que hablan, fantasía, realidad, situaciones dramáticas, mundos salidos de sueños, que rayan en pesadillas y personajes únicos. De verdad es un imprescindible de la literatura en general si eres de los que les gusta leer cuentos.
También de relatos presentó Hombres sin mujeres, siete cuentos en los que hay un común denominador, se trata de hombres que han perdido a su pareja, cada uno por sus razones y cada uno supera el dolor de forma diferente. Después del terremoto, es de los que menos me han gustado, pero es algo más personal y dirigido a su pueblo, son cuentos en los que habla de como superó la gente el terremoto de 1995 en Kobe.
El elefante desaparece fue su más reciente libro de cuentos, en el que el relato principal es sobre un hombre obsesionado con la desaparición de un elefante del zoológico. Y aquí también aparece uno de mis favoritos, una pareja con hambre que decide asaltar un McDonalds no por dinero, sino por hamburguesas.
1Q84 dividido en tres partes, es un homenaje al mundo de George Orwell, aunque se va más por una vía fantasiosa, no deja de ser una novela dura, en donde se habla de los cambios generados por la mano del hombre, lleno de momentos arriesgados y con una protagonista hecha de hierro.
After Dark es de mis favoritos, simple, cortito, rápido, pero profundo. Es sobre una mujer que va recopilando sueños, pues se encuentra inconsciente, pero hila elementos importantes como la música, y personajes que pareciera están de relleno o que son muy extraños, pero que son claves para comprender qué está pasando.
Siguiendo con los que tengo en mi top, llegamos Al sur de la frontera al oeste del sol. Una historia sobre un ser solitario, que pareciera ha encontrado la felicidad, pero se reencuentra con su amor de la infancia, una peculiar mujer con un defecto en la pierna; todo se vuelve bizarro y obsesivo. Una historia de amor que sólo Murakami pudo escribir.
Baila, Baila, Baila, es una especie de secuela de La caza del carnero salvaje, un par de libros sumamente importantes para comprender al nipón. El Hotel Delfín y el hombre vestido de carnero, son dos elementos tan geniales, que mejor descúbrelos, no te cuento.
Lo mejor y un extra
Crónica del pájaro que da vuelta al mundo es tal vez su obra maestra. Un libro enorme de más de mil páginas. La trama se centra en una intriga, una mujer llama a un hombre, desde ese momento le comienzan a suceder cosas muy extrañas, su vida se está borrando y deberá enfrentar a algo fantasmagórico para comprender si es un sueño o de plano hay algo que debe resolver.
El fin del mundo y un despiadado país de las maravillas no es lo mejor de Murakami. Es una novela fantástica que une a dos contrapartes, por un lado conocemos al fin del mundo y el otro es un extraño país amurallado conocido como el de las maravillas.
Kafka en la orilla es mi número uno, es el que realmente considero debería ser un clásico y una lectura casi, casi obligatoria. Gatos que hablan, temas bélicos, sueños, olvidos, rencores, pasiones, un personaje que sale del whiskey escocés para convertirse en un tipo que prostituye mujeres, lo tiene todo y a pesar de su larga extensión, es una lectura sumamente disfrutable.
De sus más recientes obras, Los años de peregrinación de un chico sin color, me recordó mucho al mundo en el que se desarrolla Tokio Blues, y es que también es un regreso a la juventud de los protagonistas.
Es un repertorio amplio
En otros libros, le reeditaron su primera obra que se llama Escucha la canción del viento / Pinball 1973, que no me llenó del todo. Además tiene un libro periodístico que no he podido terminar de leer que lleva por título Underground. Sus únicos dos libros que no tengo, y que no son literatura como tal son De que hablo cuando hablo de correr y De que hablo cuando hablo de escribir, un día de estos será.
No hay orden, todos son igual de buenos. Justo escribiendo esto me ha pasado algo, me entraron las ganas de leer nuevamente las obras de este escritor, así que no perderé más tiempo. Con su permiso me vuelvo a sumergir en las páginas.
Óscar Beltrán ha trabajado en medios impresos y radiofónicos como reportero en las fuentes de cultura, policíaca y deportiva. Ahora se desempeña como editor en jefe de la aplicación para smartphone «Plans».