La contienda electoral está entrando en su última etapa con una clara ventaja de Movimiento Ciudadano (MC) en Jalisco, mientras que Morena mantiene su rezago en un lejano segundo lugar, lo que ha provocado que recurran a una lastimosa jugada: Arremeter contra el árbitro electoral.

Los estudios de opinión de Reforma, El Universal, El Heraldo, Campaigns and Elections Research y Polls MX, entre otros, arrojan una diferencia de 10 puntos porcentuales en promedio entre Pablo Lemus y Claudia Delgadillo, candidata de la coalición Sigamos Haciendo Historia. Estos números comprueban el respaldo a los buenos gobiernos de MC frente al desastre de gobierno que ocasiona Morena.

En ese contexto es que se desarrolló el pasado lunes la firma del Acuerdo por la Integridad Electoral y la Vida Cívica del IEPC Jalisco. Un ejercicio inédito, pero indispensable que convocó a las candidatas y al candidato a la gubernatura a respetar las reglas del proceso electoral y reconocer los resultados del próximo 2 de junio. 

Tanto Pablo Lemus como Laura Haro, candidata de la coalición Fuerza y Corazón por Jalisco, llegaron puntuales a la cita en el Instituto Cultural Cabañas, donde también asistieron como testigos representantes de las cúpulas empresariales, universidades, organizaciones civiles y medios de comunicación. La nutrida asistencia ejemplificó la enorme trascendencia del acuerdo: Ratificar el compromiso democrático de todos los actores. 

Pablo Lemus firmó sin chantajes ni descalificaciones, y manifestó su total respaldo y respeto al trabajo de la autoridad electoral, lo que demuestra el compromiso democrático del candidato emecista.

Claudia Delgadillo y los representantes de los partidos Morena, PVEM, PT, Hagamos y Futuro, llegaron a la hora que quisieron, irrumpieron en la sesión ya iniciada, amenazaron a la autoridad electoral y condicionaron el acuerdo.

“Firmo si me firmas” fueron las palabras que repetía una y otra vez la candidata morenista a la consejera presidenta del IEPC Jalisco, Paula Ramírez, con la intención de condicionar su rúbrica a que la consejera firmara otro documento que le entregó sin previo aviso. 

Ante la tensión y desconcierto del momento, Ramírez cedió y la candidata de Morena firmó, pero no sin antes lanzar un sinfín de ataques y reclamos a la autoridad electoral. 

Esta penosa actitud de Morena comenzó desde que el IEPC desechó una infundada queja de violencia política de Claudia Delgadillo contra Pablo Lemus. Recurso que fue presentado por la candidata con la única intención de generar una cortina de humo, ante el grave señalamiento de corrupción que sigue sin aclarar: El origen de la casota que posee y que no incluyó en su declaración patrimonial.

Cabe recordar que Morena ya había arremetido contra el organismo electoral meses atrás por haberle cancelado más de 50 candidaturas en Jalisco debido a que fueron omisos en los registros. En lugar de asumir su responsabilidad, optaron por descalificar al IEPC.

Falta menos de un mes para la elección que definirá el rumbo de Jalisco para los próximos años, y seguramente veremos a Morena intensificar sus reclamos y descalificaciones sin fundamentos con la intención de boicotear la contienda, pero en Jalisco siempre hemos demostrado tener una altura democrática que sabrá sobreponerse al engaño y a la trampa. 

Sobre el autor

Omar Enrique Cervantes Rivera es secretario técnico de la campaña de Pablo Lemus y ex secretario general del Ayuntamiento de Tlajomulco. Escribe a @OmarCervantes_R.

En el tercer debate de nuevo hubo comentarios fuera de lugar hacia una candidata, el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana de Jalisco (IEPCJ) no solo guarda silencio, además mutila la grabación del comentario en su video de YouTube.

De nueva cuenta el candidato de Movimiento Ciudadano (MC) a la gubernatura de Jalisco, Pablo Lemus Navarro, vuelve a meterse en serios problemas al señalar que las candidatas, Laura Haro, de la coalición Fuerza y Corazón por Jalisco, y Claudia Delgadillo, de la alianza Sigamos Haciendo Historia, son “hijas de Alito -presidente nacional del PRI-” . 

Acción por la que de inmediato Laura Haro anunció medidas legales ante la autoridad electoral correspondiente contra Lemus, quien terminó el debate con una cara desencajada y con el ánimo por los suelos, pues en reiteradas ocasiones volvió a ser señalado por la candidata del PRI, PAN y PRD de haberle faltado al respeto. 

Por su parte, los experimentados conductores del debate, Belén Zapata y Jorge Octavio Navarro, poco pudieron hacer ante los reclamos airados de la candidata de Fuerza y Corazón por Jalisco, pues aunque le apagaron los micrófonos se podían escuchar sus reclamos de inconformidad y hasta les lanzó el reto a las consejeras del árbitro electoral a no ser omisas ante los dichos del emecista.  

En el debate anterior, sucedido en Ciudad Guzmán, Jalisco, Pablo Lemus le dijo a su contrincante, Claudia Delgadillo, que era una “amiga íntima de Peña Nieto”, lo que le ocasionó denuncias por parte de la morenista, las cuales no fueron tomadas en cuenta por el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana. 

Varios analistas dijeron que Lemus tendría que irse con cuidado en este último debate al hacer comentarios sexistas hacia sus compañeras y menos sacarlos de contexto, para no variar no hizo caso a las advertencias lo que le valió una serie de críticas en redes sociales y seguro otra serie de demandas en su contra, pero ahora por parte de la candidata Laura Haro, quien ya tiene trabajando a todo su equipo jurídico para hacer los anuncios sobre las acciones que emprenderán y que seguro serán sujetas de análisis esta semana. 

El IEPCJ publicó el debate completo en su cuenta de YouTube, pero no se ve ni se escucha el momento en el que Lemus le dice a Laura Haro “hija de Alito”. El fragmento simplemente no está, aunque en la transmisión en vivo, emitida por el Canal 44 de la UdeG sí se pudo apreciar.

Hasta anoche el organismo no había aclarado porque esa frase fue cortada de manera muy sospechosa. 

El Dato

La cuenta regresiva está en proceso, entramos a la segunda semana de mayo, con la agenda más fácil para Claudia Delgadillo que para Pablo Lemus, quien remará contra corriente y con un segundo debate al hilo perdido. Varios de los analistas políticos le dieron el triunfo a la morenista, sería el segundo victorioso y cerrando fuerte.

Sobre el autor
Rodolfo Madrigal Castro es comunicador y periodista. Actualmente trabaja como consultor político en la campaña de Claudia Delgadillo, candidata a la gubernatura de Jalisco por la coalición “Sigamos Haciendo Historia”, conformada por los partidos PT, PVEM, Hagamos y Futuro. Escribe a rmadrigalcastro@gmail.com.

El reciente informe publicado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) con motivo del Día del Niño en México revela una preocupante situación respecto a la educación infantil en el País.

Según la Encuesta Nacional del Sistema de Cuidados (Enasic) 2022, uno de cada cuatro menores de edad no asiste a instituciones educativas para recibir educación preescolar. Este dato arroja luz sobre las barreras que enfrentan muchos niños y niñas mexicanos en su acceso a la educación desde una edad temprana.

El reporte del Inegi destaca que, si bien el 87.8% de la población de 3 a 17 años asiste a la escuela en México, solo el 74.3% de los niños de 3 a 5 años acude a preescolar, kínder o primaria. Entre las razones que se esgrimen para esta situación se encuentran la percepción de falta de necesidad y las dificultades económicas y de acceso a servicios de cuidado infantil.

Además, el informe revela que un 8.7% de la población de 6 a 17 años no asiste a la escuela por diversas razones, incluyendo la falta de interés o aptitud, problemas económicos y personales. Estas cifras resaltan la necesidad de abordar no solo las barreras económicas, sino también las sociales y emocionales que pueden afectar el acceso y la permanencia en la educación.

En última instancia, el informe del Inegi subraya la importancia de invertir en la educación infantil como un pilar fundamental para el desarrollo futuro del país. Garantizar que todos los niños tengan acceso a una educación de calidad desde una edad temprana no solo es un imperativo ético, sino también una inversión en el futuro de México y en su capacidad para prosperar en un mundo cada vez más competitivo y globalizado.

La conmemoración del Día del Niño en México no sólo es una ocasión para reflexionar sobre la situación de la infancia en el país, sino también una oportunidad crucial para impulsar compromisos políticos que garanticen un futuro más prometedor para las generaciones venideras. En este contexto de campañas políticas electorales, es imperativo que los líderes y candidatos aprovechen la construcción de sus plataformas políticas para incluir compromisos claros y tangibles en materia de educación infantil. La calidad de la educación que reciben nuestros niños y niñas es fundamental para su desarrollo personal y profesional.

Por lo tanto, en este momento crucial, debemos exigir a nuestros líderes políticos que se comprometan a generar las mejores condiciones para la educación de calidad en México. Es a través de una educación sólida que los niños pueden adquirir las herramientas necesarias para alcanzar su máximo potencial y contribuir al progreso y desarrollo de nuestra sociedad.

Nos leemos la siguiente semana y recuerda luchar, luchar siempre, pero siempre luchar desde espacios más informados que construyen realidades menos desiguales y pacíficas.

Sobre el autor

Luis Sánchez Pérez es doctorante y maestro en Políticas y Seguridad Públicas en IEXE Universidad, abogado por la Universidad de Guadalajara. Profesor de asignatura en la Universidad de Guadalajara y en la Universidad Enrique Díaz de León. Investigador de medios de comunicación y participación ciudadana en el Laboratorio de Innovación Democrática. Colaborador semanal en Milenio, El Occidental y El Semanario.